Aquí está la realidad del cumplimiento de la palabra de Dios: Estuve observando esta flor en mi patio desde hace dos semanas. Cuando estaba florecida y muy hermosa le hice una foto, se mantuvo así hermosa un tiempo. Poco a poco se fue marchitando y le hice otra foto dónde queda ilustrada la palabra del Señor que dice: “Porque: Toda carne es como hierba, Y toda la gloria del hombre como flor de la hierba. La hierba se seca, y la flor se cae;” (1 Pedro 1:24)
Esta es una imagen de la vanagloria y debilidad de la vida humana sin Dios
La conclusión de todo esto es que el hombre natural se marchita como la hierba y perece en el día del juicio de Dios, pero los creyentes no continuarán con la característica de la mortalidad del primer hombre, que también está notablemente representada por la hierba seca y la flor que se marchita . El creyente volverá a participar de la naturaleza Divina (2 Pedro 1: 4). Como Pedro, recibe su vida de la Roca: “¡Tú eres el Cristo, el Hijo, el Hijo del Dios viviente!” (Mateo 16: 16-18).
Estamos unidos con Él, por la muerte de uno, vivimos eternamente. Si el Señor se demora, nuestros cuerpos volverán al polvo, pero serán puestos en incorrupción e inmortalidad y seremos arrebatados del poder de la muerte y sacados del dominio de la muerte y la corrupción cuando Él venga y nos lleve a tenernos. en su gloria De esta manera siempre estaremos con Él.
