En este breve video, nuestro hermano, Sugel Michelén, nos enseña que vivimos en tiempos muy difíciles, asi que debemos fortalecernos en el espíritu santo y depender de él.
Cristo nos dejó su paz, pero es una paz que se experimenta, al creer por el poder del espíritu santo, somos tan débiles que incluso creyendo en las promesas y descansando en ellas necesitamos el espíritu para hacer eso.
Señor estoy en la aflicción voy a leer tu palabra por favor háblame señor, y por favor que tu espíritu santo que mora en mi ilumine mi entendimiento, para que yo pueda entender tus promesas y para que yo pueda descansar en tus promesas tranquilamente y sosegadamente. Así que no se turbe vuestro corazón y tenga miedo sabes por qué Hebreos 13:5 porque él dijo, “No te desampararé, ni te dejaré;” de manera que podemos decir confiadamente el Señor es mi ayudador, no teme de lo que me pueda hacer el hombre, no temeré él lo dijo, y él es fiel, él es el todopoderoso y por lo tanto nadie puede detener su mano, nadie puede dejar que la haga lo que él ha prometido hacer, él es fiel, él es sabio, el santo, él es bueno, él es misericordioso, no temeré lo que me pueda hacer el nombre. AMIN, AMIN, AMIN.
