En el marco de la serie Poder En La Debilidad que lleva el pastor Miguel Núñez sobre la segunda carta del apóstol Pablo a los Corintios, el mensaje de hoy lo ha titulado: Su Gracia Es Omnipotente, el cual está basado en el los versículos del 1 al 10 del capítulo 12 de esta carta.
En estos primeros versículos de este capítulo, Pablo continua la defensa de su apostolado frente a las distorsiones de la verdad del evangelio de Cristo que tenían los falsos apóstoles que habían llegado a Corinto. En estos versículos el apóstol narra las revelaciones que recibió, las cuales fueron utilizadas para su provecho espiritual.
Estos mensajes tienen una línea conductual, una línea melódica que nos lleva a entender la defensa de Pablo de su ministerio, de su apostolado, mostrando la autenticidad del ministerio, siendo el punto clave de los mensajes que el poder se perfecciona en la debilidad, que es el título de la serie. Mientras más débil es el hombre, más fuerte se hace Dios.
En estas líneas no cabe dudas que el apóstol habla de sí mismo. No sabe si las cosas celestiales descendieron hacia él mientras su cuerpo estaba en trance, como en el caso de los antiguos profetas; o si su alma fue despojada momentáneamente del cuerpo y llevada al cielo, o si fue llevado en cuerpo y alma. No intentó publicar al mundo lo que había escuchado allá, pero expone la doctrina de Cristo. La iglesia se edifica sobre ese cimiento, y sobre él debemos edificar nuestra fe y esperanza.
El apóstol narra el método que Dios asumió para mantenerlo humilde y para evitar que se exaltara desmedidamente por las visiones y revelaciones que había recibido. Se dice que este aguijón en la carne era un mensajero que Satanás envió para mal, pero Dios lo uso y venció para bien. La oración es un ungüento para toda llaga, remedio para toda enfermedad, y cuando estamos afligidos con aguijones en la carne, debemos entregarnos a la oración. Los problemas son enviados para enseñarnos a orar; y siguen para enseñarnos a insistir en la oración. Cuando Dios no quita nuestros problemas y tentaciones, pero nos da gracia suficiente, no tenemos razón para quejarnos.
Su poder se perfecciona en nuestra debilidad, por lo que Su gracia es suficiente para iluminarnos y consolarnos en todas las aflicciones y angustias. Cuando somos débiles en nosotros mismos, entonces somos fuertes en la gracia de nuestro Señor Jesucristo. Si nos sentimos débiles en nosotros mismos, entonces vamos a Cristo, recibimos poder de Él y disfrutamos más las provisiones del poder y la gracia divina.
En estos versículos vemos tres temas: 1.- La visión o revelación de Dios a Pablo, 2.- El aguijón en el cuerpo de Pablo de parte de Dios, y 3.- El mensajero de Satanás utilizado por Dios, la debilidad de Pablo donde Dios se fortalece.
1.- Pablo narra sus experiencias de la presencia de Dios. Fue arrebatado al tercer cielo y le fueron reveladas palabras que a ningún hombre se le permite revelar. Por eso duró 14 años para hablar de eso, lo mantenía en secreto. No quería que lo vieran como un ser sobrenatural, quería que lo vieran como un ser humano normal, y que Cristo sea quien brille en él, no él y su persona. No quería gloriarse de eso.
2.- Debido a esa visitación de Dios a Pablo, y para que no se enaltezca, para que no se gloríe de sí mismo, Dios le dio un aguijón en la carne. No se sabe con exactitud lo que realmente era ese aguijón, todo lo que mencionan es especulación. Lo que se sabe es que fue utilizado por Dios para crecimiento espiritual de Pablo. El aguijón le fue dado de parte de Dios, un regalo de parte de Dios, para que no se enorgulleciera y fuera descalificado para el ministerio. Era una disciplina preventiva en la vida de Pablo.
3.- Este aguijón viene de parte de Satanás, pero utilizado para bien y crecimiento espiritual de parte de Dios. Nuestra paz no está en nuestras circunstancias, sino en la persona de Jesús quien controla nuestras circunstancias. Pablo aceptó este aguijón para recordarse en todo momento que en su debilidad Dios se fortalece. Dios le dijo a Pablo que no le quitaría ese aguijón, que Su gracia le era suficiente. En nuestras vidas la gracia de Dios es omnipotente, nos sacó de la esclavitud del pecado, nos regaló la salvación para pasar la eternidad junto a Él.
Las fortalezas nos hacen creer que estamos en control de las circunstancias, mientras que la debilidad nos fortalece en la persona de Jesús. Por eso Pablo dice que se gloriará en sus debilidades, que Dios le ha dado fortalezas y por eso se gloría en Dios.
Por eso se complace en sus debilidades, en insultos, en persecuciones, por amor a Cristo, porque en las debilidades se hace brillar la gracia y poder de Cristo.
Padre celestial, fortalece nuestra fe. Que podamos reconocer nuestras debilidades y entregarlas a Dios, descargarnos en Él, para que Él muestre Su fortaleza y poder. Bendiciones.