Luis Cano – Autoproclamación de Cristo – Lucas 4:14-30

Web: http://iglesiadeciudadreal.es/
Podcast:http://www.ivoox.com/podcast-iglesia-..

LECTURA PRINCIPAL – TARDE 07/07/2019
Lucas 4:14-30 Reina-Valera 1960 (RVR1960)
Jesús principia su ministerio
(Mt. 4.12-17; Mr. 1.14-15)
14 Y Jesús volvió en el poder del Espíritu a Galilea, y se difundió su fama por toda la tierra de alrededor.

15 Y enseñaba en las sinagogas de ellos, y era glorificado por todos.

Jesús en Nazaret
(Mt. 13.53-58; Mr. 6.1-6)
16 Vino a Nazaret, donde se había criado; y en el día de reposo[a] entró en la sinagoga, conforme a su costumbre, y se levantó a leer.

17 Y se le dio el libro del profeta Isaías; y habiendo abierto el libro, halló el lugar donde estaba escrito:

18 El Espíritu del Señor está sobre mí,
Por cuanto me ha ungido para dar buenas nuevas a los pobres;
Me ha enviado a sanar a los quebrantados de corazón;
A pregonar libertad a los cautivos,
Y vista a los ciegos;
A poner en libertad a los oprimidos;

19 A predicar el año agradable del Señor. m

20 Y enrollando el libro, lo dio al ministro, y se sentó; y los ojos de todos en la sinagoga estaban fijos en él.

21 Y comenzó a decirles: Hoy se ha cumplido esta Escritura delante de vosotros.

22 Y todos daban buen testimonio de él, y estaban maravillados de las palabras de gracia que salían de su boca, y decían: ¿No es éste el hijo de José?

23 Él les dijo: Sin duda me diréis este refrán: Médico, cúrate a ti mismo; de tantas cosas que hemos oído que se han hecho en Capernaum, haz también aquí en tu tierra.

24 Y añadió: De cierto os digo, que ningún profeta es acepto en su propia tierra.

25 Y en verdad os digo que muchas viudas había en Israel en los días de Elías, cuando el cielo fue cerrado por tres años y seis meses, y hubo una gran hambre en toda la tierra;

26 pero a ninguna de ellas fue enviado Elías, sino a una mujer viuda en Sarepta de Sidón.

27 Y muchos leprosos había en Israel en tiempo del profeta Eliseo; pero ninguno de ellos fue limpiado, sino Naamán el sirio.

28 Al oír estas cosas, todos en la sinagoga se llenaron de ira;

29 y levantándose, le echaron fuera de la ciudad, y le llevaron hasta la cumbre del monte sobre el cual estaba edificada la ciudad de ellos, para despeñarle.

30 Mas él pasó por en medio de ellos, y se fue.

Añadir Comentario