(Hebreos 11:23-29)
Moisés fue un líder importante del pueblo hebreo y muchos lo consideran un héroe del Antiguo Testamento. Fue llamado a hacer grandes cosas con la ayuda del Señor, y se encontró con la presencia del Todopoderoso de manera íntima. Pero todas sus asombrosas hazañas fueron posibles solo por su fe.
El pasaje de hoy es parte de lo que se conoce como el “Salón de la fe” de la Biblia. Los honrados en este capítulo creyeron en Dios y demostraron su confianza con una acción obediente. Santiago 2:14 sugiere que toda fe genuina resulta en acción, y eso también es cierto para nosotros.
Caminar por fe no significa que estemos en un camino fácil. Puede incluir dificultades e incluso persecución. Pero cuando nos mantenemos fieles al Señor a través de todo, nuestra fe se demuestra genuina y crecemos en semejanza a Cristo.
¿Estás dispuesto a confiar en la fuerza de Dios en tu debilidad? ¿Crees que Él te dará poder para mantenerte firme si enfrentas la adversidad? El Señor responde a la fe capacitándonos para soportar las dificultades, demostrando Su poder en nuestra debilidad y brindándonos satisfacción y gozo en medio del sufrimiento.
