Vigésima tercera lección de la serie “La Doctrina de Dios.” Siguiendo con los atributos intelectuales de Dios, ahora contemplaremos la sabiduría de Dios. Hablando generalmente, la sabiduría es aquella actividad en el hombre el cual, basado en el mejor conocimiento, busca los mejores fines a través de los mejores medios. En cuanto a la sabiduría de Dios, Louis Berkhof la define como “Aquella perfección de Dios por medio de la cual Él aplica su conocimiento a la obtención de sus fines conforme a la manera que más lo glorifique.” A la luz de conocer que Dios es todo sabio podemos confiar en él a pesar de que nuestras circunstancias no parezcan favorables; además somos amonestados a dejar de confiar en nuestro propio consejo y nos alienta a usar los medios que Dios ha establecido para los mejores fines en nuestra vida.
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