En gran manera me gozaré en Jehová, mi alma se alegrará en mi Dios; porque me vistió con vestiduras de salvación, me rodeó de manto de justicia, como a novio me atavió, y como a novia adornada con sus joyas. (Proverbios 14:13)
Una de las características de nuestro tiempo es la ausencia casi general de un pozo profundo.Pocas veces se encuentra gente verdaderamente feliz.Sin embargo nuestra sociedad organizando muchas distracciones con el fin de regocijarse,tratando de borrar así las preocupaciones de la vida.Pero es una alegría demasiado artificial que resulta de las diversiones propuesta a menudo oculta la tristeza.Los corazones permanece insatisfechos, porque la verdadera felicidad no se haya en las condiciones de vida fáciles o incluso agradable.
A menudo el rostro refleja lo que el alma siente.Sí en nuestro rostro llevamos la huella de la preocupaciones y la penas,¿no es, frecuentemente, porque no conocemos el verdadero gozo? Las peores distracciones del mundo son efímeras y no puede satisfacernos.
Quisiéramos compartir con el lector goces reales y duraderos:el conocimiento de Jesús, el amor de Dios y la esperanza cristiana,los cuales dan un verdadero razón de vivir.
En el capítulo 8 de hechos leemos de un hombre a quién se le anuncia a Jesús cómo Salvador.Este contacto con Dios por medio de Jesucristo era precisamente lo que le faltaba a su alma.
Después de haberle encontrado por la fe,”siguió gozoso su camino”.!Feliz encuentro que da el verdadero gozo en el corazón!
Aun en la risa tendrá dolor el corazón; Y el término de la alegría es congoja.(Proverbios 14:13)